Resumen Inicial
En este ensayo pretendo abordar otra visión acerca de la inteligencia, es decir, el estudio de la inteligencia dando un mayor énfasis al mundo que nos rodea, es decir, del medio socioemocional. Así mismo, describir la importancia que tiene la Inteligencia Emocional en los estudiantes del nivel medio y superior.
INTRODUCCIÓN
En el entorno en el que nos desenvolvemos nos vemos inmiscuidos en distintos contextos sociales, económicos, culturales, políticos, académicos, laborales etc. y dependiendo del contexto es la forma en la que cada uno de nosotros nos comportamos, estos patrones de conducta los hemos adquirido a lo largo de nuestra vida, desde muy pequeños los hemos aprendido en nuestro hogar y con el curso de los años de la misma sociedad.
Las situaciones a las que estamos expuestos nos pueden causar estrés, depresión, ansiedad, enojo influyendo emocionalmente en nuestra persona, un ejemplo de lo anterior y donde es muy factible que ocurra esto es el ámbito académico y laboral; ahora bien, es importante mencionar dos preguntas esenciales la primera es ¿Cómo debemos manejar nuestras emociones de manera efectiva? y ¿Cómo influyen en la toma de decisiones?.
“Cualquiera puede enfadarse, eso es algo muy sencillo. Pero enfadarse con la persona adecuada, en el grado exacto, en el momento oportuno, con el propósito justo y del modo correcto, eso, ciertamente, no resulta tan sencillo”[1]. Aristóteles
¿Cómo influye la Inteligencia Emocional (IE) en el desarrollo intelectual de los estudiantes en el nivel medio y superior para su aprendizaje? y ¿Cuál es el papel del maestro en el desarrollo de la IE en los estudiantes?
Fue a principios de los 90’s cuando Meyer y Salovey introdujeron el termino de Inteligencia Emocional (IE), definiéndola como “Habilidad para percibir, valorar y expresar emociones con exactitud, la habilidad para acceder y/o generar sentimientos que faciliten el pensamiento; la habilidad para comprender emociones y el conocimiento emocional y la habilidad para regular las emociones promoviendo un crecimiento emocional e intelectual”.[2]
Los estudios de la Inteligencia Emocional se han ido consolidando hasta nuestros días, pero fue en 1995 con la obra “La Inteligencia Emocional” de Daniel Goleman cuando el este término se popularizó por todo el mundo.
Ahora bien, para enfocarnos al ámbito académico, es importante mencionar que las emociones juegan un papel fundamental en la educación y en nuestro aprendizaje ya que todos los días nos vemos rodeados de estas, de ahí surge la importancia de aprender a regular nuestras emociones, conocerlas, identificarlas y no dejar que nuestras emociones se salgan de control, es válido decir que para tomar una decisión se utiliza el razonamiento, no obstante, no podemos dejar de lado a las emociones que también intervienen en la toma de decisiones; cuando un estudiante aprende a manejar sus emociones de manera efectiva mejora su rendimiento académico.
En el aula los docentes no se involucran con los estudiantes lo suficiente para saber que emociones experimenta el alumno, no niego la posibilidad de que algunos profesores si lo hagan, no obstante, sabemos que a veces la comunicación profesor-alumno no va más allá de dar clase. De acuerdo con Goleman el rendimiento escolar de los estudiantes depende de aprender a aprender y los objetivos a reeducar como clave fundamental es “la confianza, es decir la sensación de controlar y dominar el propio cuerpo, la propia conducta y el propio mundo, como segundo punto tenemos la curiosidad que es la sensación de descubrir algo que es positivo y placentero, en tercer término está la intencionalidad, el deseo y la capacidad de lograr algo y actuar en consecuencia, como cuarto punto está el autocontrol que es la capacidad de modular y controlar las propias acciones, en quinto lugar está la relación, capacidad para relacionarse con los demás, como sexto punto está la capacidad de comunicar y por último la cooperación que en el ámbito escolar aplica cuando se realizan actividades grupales”.[3]
El maestro puede ayudar a sus alumnos fomentado que el alumno exprese sus emociones, que se sienta seguro de sí mismo (confianza), que el ambiente de trabajo sea agradable etc. mejorando su aprendizaje en el aula.
Por otra parte, es necesario aprender a expresar las emociones, y vincularlas con los colores ya que estos también influyen en los estados de ánimo de los estudiantes, cuando una persona está triste ve la vida de color negro, cuando está enojada la ve de color rojo etc., la Inteligencia Emocional se puede aprender con el tiempo, a su vez podemos desarrollarla por medio de la música ya que cuando escuchamos una canción podemos identificar nuestras emociones con el autor de la canción o con el artista que la interpreta. “La música es un buen vehículo para dejar aflorar las emociones que están presentes en nuestra conciencia y también las que están en el subconsciente, para detectarlas, reflexionar sobre ellas, etiquetarlas, regularlas y aprovecharlas de manera constructiva”[4]. La estética también juega un papel en nuestro estado emocional, el hecho de tener un objeto que consideramos bello nos hace sentir contentos, mientras que si tenemos algo que no nos agrada nuestro estado de ánimo no va a ser el mismo.
Para concluir, quiero mencionar como los medios de comunicación nos bombardean día con día diciéndonos que es lo que está de moda, que colores se están usando, que accesorios van con la temporada etc. influyendo en la toma de decisiones de cada uno de nosotros, es decir, son tan persuasivos que nos mueven emocionalmente. Por lo tanto es vital dar un manejo adecuado a nuestras emociones, ya que esto nos permite estar mejor preparados para afrontar cualquier situación que se nos presente.
Considero que la inteligencia intelectual se complementa con la inteligencia emocional, si al aplicarlas ambas se fusionan conformando una sola, los estudiantes al concluir sus estudios podrán salir mejor preparados para afrontar al mundo. El bienestar emocional de los egresados permitirá que desarrolle sus habilidades de manera eficaz en su vida laboral.
BIBLIOGRAFÍA
Olguín, J. InteligenciaEmocional, http://www.grupoelron.org/autoconocimientoysalud/Inteligenciaemocional.htm.
Cortese A. Qué es la Inteligencia Exitosa III, http://www.inteligenciaemocional.org/actividades/inteligencia_exitosa3.htm.
Neiret, S. El portal de Inteligencia Emocional.
Revista Electrónica de Motivación y Emoción
http://reme.uji.es/articulos/numero22/article6/texto.html
[1] Pérez, N. y Castejón, J. L. Relaciones entre la Inteligencia Emocional y el Cociente Intelectual con el rendimiento Académico en Estudiantes Universitarios. Revista Electrónica de Motivación y Emoción.(Volumen IX, No. 22). Obtenido en Noviembre 26, 2010 de
http://reme.uji.es/articulos/numero22/article6/texto.html
[2] Qué es la Inteligencia Exitosa III. Obtenido en Noviembre 20, 2010 de http://www.inteligenciaemocional.org/actividades/inteligencia_exitosa3.htm.
[3] Olguín, J., Inteligencia Emocional. Obtenido en Noviembre 23, 2010 de http://www.grupoelron.org/autoconocimientoysalud/inteligenciaemocional.htm.
[4] Neiret, S., El portal de Inteligencia Emocional. Obtenido en Noviembre 25, 2010 de http://www.inteligenciaemocional-portal.org/ARTICULOS/SARA%20NEIRET.pdf
[3] Olguín, J., Inteligencia Emocional. Obtenido en Noviembre 23, 2010 de http://www.grupoelron.org/autoconocimientoysalud/inteligenciaemocional.htm.
[4] Neiret, S., El portal de Inteligencia Emocional. Obtenido en Noviembre 25, 2010 de http://www.inteligenciaemocional-portal.org/ARTICULOS/SARA%20NEIRET.pdf
